En el albor de una nueva era para la conectividad móvil, las operadoras ya se están preparando para dar el salto cualitativo y cuantitativo que esta les exige. Es el caso de Telefónica, que ha alcanzado un acuerdo con Nokia para evaluar las tecnologías 4,5G, 4,5G Pro y 4,9G de cara a evolucionar sus redes hacia la 5G.
Conjuntamente, ambas compañías evaluarán el despliegue y el uso de estas tecnologías, los nuevos servicios que de estas se desprendan, y el uso que de estos se haga.
Nokia ha establecido una ruta hacia el 5G para operadores como Telefónica, de manera que al utilizar sus tecnologías 4,5G, 4,5G Pro y 4,9, se ofrezcan en el lugar y momento necesarios avances como una mayor velocidad y capacidad así como una latencia mejorada.
En virtud de este acuerdo, Nokia realizará una evaluación de los recursos y usos que permitan maximizar el servicio ofrecido a los suscriptores individuales y a las aplicaciones como las de la IoT (Internet de las Cosas).
Ambas compañías llevarán a cabo pruebas conjuntas para aumentar la capacidad en zonas con alta demanda del centro de las ciudades, así como en zonas suburbanas y rurales, especialmente en mercados donde el espectro tradicional LTE es limitado.
El objetivo último es preparar las redes de Telefónica para que puedan absorber el tráfico resultante del incremento de comunicaciones de datos fruto de las aplicaciones M2M (diálogo entre máquinas), y de los usuarios.
La cada día mayor disponibilidad de servicios en la nube disparará el consumo de vídeo online, las aplicaciones de realidad virtual, y el traspaso de datos captados por sensores, lo que hace necesaria la 5G y unas redes de datos cada día más rápidas y eficaces, con una mayor respuesta (menor latencia).