Telefónica ha anunciado que convertirá a ambas ciudades españolas en un terreno de prueba para la implantación de la 5G a lo largo de los próximos tres años (de 2018 a 2020), junto a Nokia y Ericsson, dos de los partners tecnológicos de la operadora española que pondrán la parte de infraestructura de red.
De esta forma, Telefónica dispondrá de un laboratorio en vivo, en el cual podrá probar no solamente la idoneidad de las soluciones técnicas utilizadas, sino también que estas cubran las necesidades de los casos de uso de los usuarios.
En este sentido, pues, los segovianos y los talaveranos podrán beneficiarse de las ventajas que les supondrá la velocidad Gigabit antes incluso que el resto de la población española, y muy por delante que la mayor parte de la población mundial.
La operadora también indica que podrá proporcionar velocidades punta de hasta 10 Gbps, y latencias de entre uno y cinco milisegundos en la conectividad móvil.
Telefónica cuenta en el proyecto de despliegue de la red 5G en estas dos ciudades con Nokia (en Segovia) y Ericsson (Talavera de la Reina) como socios tecnológicos. Ericsson impulsa la estandarización del 5G y ya ha consolidado algunos grandes contratos que le sitúan a la vanguardia de la futura generación móvil. A su vez, Nokia, también es un contribuidor clave en la estandarización, disponiendo de un amplio portfolio de extremo-a-extremo y la tecnología 5G, basada en el estándar de la compañía finlandesa, que será compatible con una amplia gama de futuros dispositivos y servicios 5G.
A lo largo del desarrollo de este plan, irán siendo puestos a disposición de los ciudadanos de estas dos ciudades, una serie de mejoras sucesivas de las distintas capacidades 5G, algunas de las cuales podrán disfrutar con sus dispositivos actuales, ya que se implantarán como optimizaciones de la red 4G. De esta forma, no será preciso disponer de un terminal 5G, de los cuales han sido presentados muy pocos y ninguno ha llegado todavía al mercado, aunque sí los que permiten conectividad 4G mejorada a 1 Gbps.
Dentro del plan, la red 5G será inicialmente non stand alone, es decir, que para funcionar necesitará como soporte una red 4G, para finalmente llegar a ser una red 5G stand alone.
En paralelo al despliegue tecnológico, se desarrollarán casos de uso 5G con pruebas de concepto de los nuevos servicios, productos, experiencias y modelos de negocio que serán posibles gracias a esta tecnología y a las ventajas de incremento de ancho de banda o disminución de la latencia que aporta.
Entre ellos, cabe destacar el trabajo junto con SEAT y FICOSA en aplicaciones de coche conectado. Estas aplicaciones conectan el vehículo con la infraestructura vial y los ciudadanos para la mejora de la seguridad y de la gestión del tráfico.