Selfie Flash: proporciona un flash delantero a tu app de cámara favorita
Actualmente, casi todos los smartphones (si no todos) salen de fábrica con un flash delantero para mejorar las fotos selfie en la oscuridad, bien sea este un flash físico al lado del objetivo de la cámara delantera de selfies, o bien uno «virtual» iluminando la pantalla, ya integrado en la app de cámara. No obstante, aún queda un buen puñado de usuarios que no dispone de dicha función integrada porque su terminal es más antiguo, o bien la compañía fabricante no se ha preocupado por dotarlo de dicha funcionalidad.
Para estos usuarios existe una posibilidad: hacerse con una app que les permita iluminar la pantalla de su móvil para que esta actúe como flash. No obstante, la gran mayoría de estas apps suelen desempeñar también la función de cámara, impidiendo con ello que los usuarios puedan utilizar su app favorita de cámara en dicha misión.
Por suerte, podemos contar con una app como Selfie Flash para Android, la cual se encarga de la funcionalidad de flash como app residente en memoria, dejando que sea otra app la que se encargue de la realización de las fotografías.
¿Y como lo hace? Simple: inserta un botón flotante en la parte de la pantalla que queramos, y que mediante su pulsación ilumina un flash en pantalla, el cual toma una forma que podemos elegir de entre unas cuantas dadas, durante un periodo de tiempo que podemos configurar.
Existen dos versiones de la app: una gratuita, a modo de demo y con solo una parte sustancial de las funcionalidades activadas, y otra de pago, que por 0,99 € nos ofrece todas las funcionalidades que permite.
Los recovecos de la app
Tras instalarla, en la primera ejecución, Selfie Flash nos explica como funciona la app:
A partir de aquí, llegamos a un menú con las principales opciones de configuración, algunas de las cuales, y como he dicho anteriormente, se encuentran limitadas:
Empezando por la parte de arriba, la entrada Size
(tamaño) nos permite definir el porcentaje de pantalla que ocupará la forma del flash:
A diferencia de las aplicaciones o terminales que ya llevan integrada la funcionalidad de iluminación de la pantalla para desempeñar la función de flash, la presente app no puede cubrir toda la pantalla con el flash, ya que en dicho caso no encontraríamos el botón para realizar la fotografía.
Obviamente, a mayor tamaño, más cantidad de luz y, por lo tanto, mejores resultados con la fotografía.
Siguiendo con las funcionalidades que tenemos en esta app para la toma de selfies nocturnos, podremos también elegir en qué lugar de la pantalla queremos situar el botón para que se muestre el flash, cosa que haremos tocando sobre él con el dedo y, sin soltarlo, arrastrarlo por la pantalla.
Debemos tener en cuenta de no tapar con este botón virtual el botón de disparo u otros controles de la app de cámara. De todas formas, en cualquier momento y ya con la app de fotos funcionando, seremos capaces de arrastrar este botón al lugar que más nos convenga.
Selfie Flash es capaz de detectar cuando estamos utilizando la cámara delantera a través de una app de fotografía, por lo que dicho botón solamente será visible cuando vayamos a hacernos una foto con la cámara frontal.
La siguiente funcionalidad que podremos configurar será el lapso de tiempo por el cual se mostrará el flash en pantalla.
Este lapso de tiempo es el que transcurrirá desde que pulsemos el botón de flash, iluminándose este en pantalla, hasta que desaparezca, y será el tiempo que tendremos para hacer la foto selfie iluminada.
La selección de colores se encuentra muy limitada en la edición gratuita, siendo mucho más amplia en la app completa que tendremos a la venta en Google Play.
No obstante, lo más habitual será que el color elegido sea el más puro e inmaculado blanco, o como mucho un amarillo chillón en según que circunstancias, que dan la mayor luminosidad.
Seguimos con la última opción, la que permite elegir la forma del flash:
Sinceramente, tal vez la más superflua de todas las opciones. Como vemos, en la app gratuita, solamente tendremos una forma, la circular, mientras que podremos optar por otras si adquirimos la app completa. No me parece este el motivo para hacerlo, inclinándome más bien por la elección de colores. Solamente la forma cuadrada me parece una excusa para adquirirla por el contenido de la presente sección.
Finalmente, y si volvemos a la parte superior del menú de la app, podemos ver el switch que nos permite activar y desactivar el botón virtual que activa el flash:
A prueba sobre el terreno
Nada mejor para saber si el invento funciona bien que probarlo sobre el terreno, así que esta noche me he armado con un viejo smartphone (en este caso, un Xperia Z1) que no tiene flash en la cámara frontal, y he salido en plena noche a hacerme alguna foto.
La primera de ellas, ha sido con la cámara tal cual, sin flash:

Como podemos apreciar, poca cosa puede distinguirse en la instantánea. Y os aseguro que es una foto mía, pero naturalmente en un entorno con poca ninguna luz. Tal vez, mi mejor perfil… 😉
Si ahora probamos con el flash de la aplicación de la que hemos estado hablando, el resultado es el siguiente:

Para tener una base de comparación más amplia, he hecho también una fotografía con una tercera app, Flash Selfie (fijaos que aunque parezca la misma, es otra, que ya analizamos con anterioridad), que incorpora la funcionalidad de cámara en la misma app:

Vemos que en este último caso la iluminación es mejor, y que Selfie Flash, la app analizada, ilumina muy poco la escena, pese a que hay una diferencia notable respecto a no disponer de ningún flash.
La única ventaja que le encuentro a esta aplicación es que nos permite utilizar la app de cámara que prefiramos, permitiéndonos combinarla con, por ejemplo, Instagram, Facebook u otra aplicación de redes sociales o mensajería instantánea, como WhatsApp.